Cinco días después de su 18 cumpleaños, Miley aún seguía de juergas locas con sus amigos, o lo que quedaba de ellos. Pero lo peor es que, para los años que lleva en esto, la ex estrella Disney fue lo suficientemente idiota para dejarse grabar en vídeo mientras fumaba alguna extraña sustancia con una pipa improvisada con una botella y en un estado etílico más que cuestionable.
Con la típica risa tonta que les entra a los que fuman porros (no es que sigamos que lo haya hecho, eh, sólo que lo parece), la cantante de Can't be tamed estaba bastante perjudicada en esta fiesta bobalicona que no le viene nada bien a su imagen como artista.
¿Estamos ante el principio del fin de Miley o será sólo una fiestecita puntual?
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